Poema erótico

¡Son tus dedos diligentes
cartógrafos,
que dibujan mis labios para
desterrar algún te quiero!
¡Delinean suavemente la curva
de mi cuello,
donde mi garganta ya se ha dado
por vencida!
Así, tus dedos expertos en llanuras
y caminos,
llegan a la cúspide en mis senos,
llenándome de afanes
y de pájaros dispersos…
¡para acaracolarte todo tú,
en la hendidura de mi vientre!
Hedda Ibarra. Colombia